Alquiler de barcos Costa Española – Barcelona

La Costa Brava nos ofrece una belleza romántica y salvaje: peñascos sobre los que se asientan pequeños bosques de pinos y acacias, bosque bajo y vegetación mediterránea, acantilados, deliciosas calas que se esconden entre cabos y a las que sólo se puede llegar en barco o a veces por tierra atravesando estrechas carreteras llenas de curvas, hermosos pueblos pesqueros, playas de arena, agua clara, un llamativo mundo submarino y, en tierra, delicias culinarias. La costa, salvaje, empieza prácticamente en los Pirineos, junto a la frontera con Francia, y llega casi hasta Barcelona.

La capital de Cataluña puede ser un buen punto de partida para las travesías por la Costa Brava. Aunque tambien hay otros como por ejemplo Palamós, que se encuentra directamente en la Costa Brava. Aparte de navegar de cala en cala y descubrir pueblos pesqueros como Tamariu o Estartit, el interior nos ofrece dos atractivos esenciales: por un lado cultura, tras las huellas de Dalí, con museos como el de Figueras o Cadaqués; por otro, arte culinario. Es cerca de Rosas/Roses donde el famoso cocinero Ferran Adrià, inventor de la llamada cocina molecular, regenta su restaurante El Bulli.

Por todas partes encontramos marinas y puertos deportivos para chárteres. En Palamós tenemos dos puertos para yates y partiendo en dirección norte encontramos Llafranc, Aiguablava, L’Estartit, L’Escala, Empuriabrava, Santa Margarida, Roses, Port de la Selva, Llançà, Colera y Portbou.

Si vamos hacia el sur en la ruta que lleva a Barcelona están Port d’Aro, Cala Canyelles, Blanes, Arenys, Port Balís, Premiá de Mar, El Masnou y la marina de Badalona. Entre marina y marina siempre hay hermosas playas de arena y calas. Y en las playas más grande como la de Lloret de Mar están los típicos emplazamientos turísticos. Podemos alquilar un chárter por ejemplo en Denia – o en Valencia, que desde la America’s Cup del 2007 se ha convertido en un punto habitual para los navegantes y aficionados a la vela.

El viento predominante es en un 70 por ciento mistral del noroeste y gregal del nordeste. Al sur del Cabo de Creus la zona es más abrigada.