Alquiler de barcos Isla Granada / Grenada

Impresionantes cataratas, frondosa vegetación, verdes y escarpadas montañas volcánicas, aromas exóticos, pueblos pintorescos y calas de ensueño. Eso es Granada, también conocida en español con su nombre en inglés (Grenada) para evitar confusiones o con el sobrenombre de Isla de las Especias. Al estado de Granada, miembro de la Commonwealth británica, además de su capital St. George’s pertenecen también la Pequeña Martinica, Carriacou y otras islas pequeñas.

A pesar de encontrarse casi en zona de huracanes, el lugar tiene una gran demanda para realizar rutas chárter. Ya las primeras empresas de chárter estacionaron aquí algunos yates y siempre se están ampliando las marinas y construyendo otras nuevas que ofrecen el mayor confort. La primera edición de la Grenada Classic Yacht Regatta se celebró en febrero del 2008 y seguirá celebrándose anualmente.

El turismo de Alquiler de barcos se concentran sobre todo en el suroeste y en el oeste de la isla de Grenada. Puertos de entrada tenemos en la misma capital: la Spice Island Marina en Prickly Bay o la Grenada Marine en St. David’s Bay. En Carriacou está Grenville y Hillsborough. Pero el centro donde se encuentran los yates deportivos es el St. George’s Harbour. La ciudad tiene un delicioso aire colonial y es una de las más bellas del Caribe. El viejo barrio del puerto, el Carenage, nos encandila con sus pequeñas casitas de colores pastel, sus construcciones de estilo colonial y la sede del parlamento, la York House. Muy pintorescos son también los mercados, sobre todo los de pescado y especias, donde podemos sentir el aroma de la nuez moscada, la canela o el clavo en el ambiente. Y por supuesto en los restaurantes del lugar ofrecen excelente comida criolla. St. George’s es además el mejor lugar para emprender recorridos para conocer la isla.

Si queremos fondear podemos echar el ancla en la gran bahía de St. George’s, especialmente en la laguna que se encuentra en el sur de ésta; en el Carenage está prohibido. Antes había menos alternativas, pero ahora existen marinas nuevas que amplían la oferta para la navegación chárter. Por ejemplo la marina del Grenada Yacht Club, muy moderna, ofrece todos los servicios, incluso lavandería e Internet, y se encuentra directamente delante de la ciudad. En la marina Grenada Yacht Services, en el este del Carenage, se encuentra la oficina de inmigración. Junto a la laguna se ha creado el complejo vacacional Port Louis Grenada donde encontramos hoteles, apartamentos y un nuevo puerto deportivo que ofrece amarres incluso para superyates de hasta 90 metros de eslora.

En el suroeste de la capital se encuentra la playa para bañistas más bonita de la isla, la Grande Anse Bay. Pero está absolutamente prohibido anclar aquí. En realidad en toda Granada está prohibido echar el ancla a menos de 200 metros de la orilla. Después de rodear el Saline Point, el extremo suroeste de la isla y lugar en el que se encuentra el aeropuerto, encontramos una serie de calas hermosísimas. En ocasiones existen delante de ellas islotes o arrecifes; pero esto no dificulta la navegación ya que están señalizadas con balizas. En la True Blue Bay hay una marina con base chárter, un complejo hotelero y un restaurante. Aquí encontramos boyas de amarre y podemos disfrutar de unas puestas de sol perfectas. En la Prickly Bay, también llamada Lance aux Epines, y en la vecina Mt. Hartmann Bay/ Secret Harbour existen ya tres puertos para yates: Spice Island Marina, Prickly Bay Marina y Martin’s Marina, que disponen de muchos amarres y de boyas de amarre. El ambiente es fantástico. Y detrás de Hog Island, en la bahía de Clarkes Court Bay, nos espera la marina del mismo nombre que, por supuesto, cuenta con un Dockside Bar. En la Egmont Bay está el Le Phare Bleu, un complejo hotelero con marina propia creado por una empresa suiza. Y por último, aunque no por ello menos importante, en el Sureste, en la Grenada Marine de la St. David’s Bay, los que viajamos en yate podemos encontrar todo lo necesario tanto para el barco como para nosotros mismos; desde un buen amarre hasta un buen restaurante o un cibercafé.

Carriacou – Pequeña Martinica

A los que navegan desde Granada hasta Carriacou les suele gustar hacer una parada y fondear en el Halifax Harbour, una gran cala situada en el oeste de Granada, con palmeras y árboles que llegan hasta la misma orilla. Pero también hay otros lugares muy bonitos para fondear delante de Saline Island y de la Ile de Ronde. Éstas y otras muchas islas pueblan la ruta que se extiende entre Granada y Carriacou.

Carriacou mantiene el nombre que le daban los indígenas arahuacos y caribes: la tierra rodeada de arrecifes. De hecho los encontramos a lo largo de toda la costa este y en todo el sur de la isla. En la costa oeste encontramos más que nada playas de ensueño. La isla tiene unos 6.000 habitantes que siempre han vivido esencialmente de lo que les otorgaba el mar y la madre tierra. Antes había grandes plantaciones de algodón y caña de azúcar en Carricou; pero ahora se está explotando cada vez más el turismo náutico. En el pequeño municipio de Windward todavía se construyen veleros siguiendo el método tradicional heredado de colonos escoceses. Y en verano podemos ver estas embarcaciones en acción en la Carriacou Regatta, una auténtica fiesta. La capital de la isla es Hillsborough, también el único lugar en Carriacou donde podemos formalizar la entrada. Podemos amarrar el dinghy en el muelle. Frente a la bahía de Hillsborough se encuentra la isla de Sandy, un lugar idílico para fondear durante el día. Palmeras en una playa de cuento, aguas transparentes y un arrecife estupendo para bucear con esnórquel. Por la noche se está mejor en la Tyrrell Bay, en el suroeste de la isla, donde encontramos dos puertos deportivos. Y en el norte hay una laguna con manglares, la Carenage, que es además zona natural protegida. A la región exterior sólo está permitido el acceso en caso de peligro de huracán. Otro puerto adecuado para amarrar el yate chárter es en Carriacou el Yacht Club de Hermitage.

La Pequeña Martinica supone el límite entre San Vicente y Las Granadinas, y tiene una larga tradición marina. Sus habitantes viven primordialmente de la pesca, los astilleros y los servicios náuticos. Además se ofrecen como tripulación. Para los yates hay una pequeña marina que cuenta con todas las instalaciones necesarias.